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domingo, 18 de julio de 2010

La Historia de los juego de plastilina

ESTA ES UN RECOPILACION DE LOS JUEGO DE PLASTILINA UNICOS


Es la triste historia de un programador (Anthony Flack), que supo sobreponerse a la adversidad y hacer su sueño realidad, hacer un juego de plastilina, bueno de plastilina y de bits, claro, muchos bits :9. Este buen hombre era un entusiasta de la animación con plastilina y empezó haciendo sus pinitos en el ahora arcaico lenguaje DIV para MS-DOS, famoso por la cantidad de juegos freeware que se hicieron con él en su día, así hizo su primera intentona en esto de los juegos de plastilina: Bert The Barbarian. Un plataformas alucinante en cuanto a gráficos y animación (todo lo que sale en pantalla es de plastilina), aunque adolece de un dificultoso control, ya que nuestro bárbaro heroe no responde tan rápido como debiera a las órdenes del teclado.
El "juego" tuvo una gran acogida y ganó algún que otro premio ( lo de las comillas es porque más que un juego es una demo técnica, por poco jugable y corto desarrollo, aunque disfrutar esas animaciones merece mucho la pena).



Es de suponer que Anthony se dio cuenta de su error y en su siguiente intento corrigió casi todos sus errores (que tampoco eran tantos), cambió al lenguaje de programación Blitz (muy utilizado en gran cantidad de juegos shareware actuales) y su siguiente obra fue el ahora famoso matamarcianos Platypus, por supuesto siguió utilizando la plástilina como base de los gráficos y animaciones y esta vez si consiguió un señor juego (quizás un pelín dificil). Lo malo es que nuestro amigo no tuvo mejor idea que vender su juego a los fabricantes del lenguaje Blitz, perdiendo así todos sus derechos sobre él, para colmo de males se le quemó la casa poco antes de terminar el juego y perdió toda su plastilina y material informático (además de su hogar, claro), por suerte una copia del juego quedó en casa de un amigo y gracias a la diosa fortuna hoy podemos disfrutar del gran juego que es Platypus.



Platypus pasó sin pena ni gloria por el mercado, quizás por culpa de su gran dificultad, quizás por el poco empeño que puso Blitz en conseguir ventas reales de los juegos que publicaba (parece que lo que más les interesaba era enseñar a los programadores que se podían hacer juegos comerciales con su lenguaje). Por suerte los amigos de Retro64 (autores de auténticas delicias videojueguiles como Best Friends) compraron los derechos de Platypus e hicieron unas cuantos ajustes a la dificultad del juego, sacándolo de nuevo a la venta (ahora como juego shareware y descargable a través de internet), está vez con gran éxito.



Por supuesto el amigo Anthony no hubiera visto ni un céntimo (aparte de los 2000$ que le pagaron por el juego cuando lo terminó) de no ser por la buena gente de Retro64 (programadores como él) que decidieron permitirle vender en su página web el juego (es curioso que te tengan que dar permiso para poder vender tu propia obra).



Y con este dinerillo y el que le prestaron sus parientes, Antonhy dispuesto a aprender de sus errores comenzó de nuevo a modelar, y próximamente nos pretende deleitar con:

Cletus

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